La narrativa comienza con un tono sombrío, donde se insinúa que cada traición comienza con una base de confianza. A medida que los personajes se enfrentan a una situación desesperada, surge la duda sobre su lealtad y el verdadero propósito de sus acciones. “¿Alguna vez te has preguntado si estamos del lado equivocado?”, se pregunta uno de los protagonistas, lo que pone de relieve la complejidad moral de su misión.