La relación de Julio y Enrique Iglesias nunca ha sido “fácil” pero una vez decidieron dar el paso, con la iniciativa de Enrique, están arreglando sus diferencias
No es la primera, ni la segunda que se habla del distanciamiento entre Julio Iglesias y su hijo Enrique. ¿Hay rivalidad entre ellos? ¿Tienen buena relación? Tras tantísimos años de especulaciones y después de que Julio Iglesias al fin abordara el tema la pasada primavera, ahora ha sido Enrique quien ha hablado largo y tendido de sus sentimientos hacia su padre, de los profundos baches de su relación paterno-filial y, lo más importante, de cómo están ahora.
Ha sido en la revista ‘Icon’ donde el artista ha confesado que vuelve a mantener una relación fluida con su padre con el que estuvo una década sin hablarse. “A los 18 años me separé de mi familia por completo. Y fue difícil. Durante diez años no tuve absolutamente ningún contacto con mi padre. Son muchos años. Sufrí mucho”, ha contado Enrique Iglesias, que ha revelado que se refugió en la música y en su carrera por completo: “Llegó un momento en el que me dije “¿qué estoy haciendo?, he perdido el contacto con mi familia por completo”. Sobre todo con mi padre, pero también con el resto de la familia”.
El cantante, que asegura que el problema entre él y su padre es una cuestión de rivalidad y egos, no otra cosa, dio el paso de llamar a su famoso progenitor para solucionar las cosas. Tras ver una conmovedora película dio el paso y llamó a Julio Iglesias: “Tuvimos una conversación muy bonita”.
Julio Iglesias dijo hace unos meses que se ve “reflejado” en Enrique Iglesias y que, como él, “no admite sugerencias”, y de ahí sus diferencias. “Él es el papá de sus hijos, que son mis nietos”, dijo Julio conmovido. Y es que para él está siendo muy importante volver a estar cerca de su hijo, y viceversa. “Es mi padre y lo quiero con toda mi alma. Lo respeto y lo admiro y hasta en parte entiendo las cosas que ha hecho en su carrera y en su vida personal”, ha dicho Enrique.