Michael Schumacher sufrió lesiones que cambiaron su vida en un extraño accidente de esquí en 2013. Durante la década transcurrida desde entonces, ha habido mucha especulación y se han revelado falsedades sobre su vida. Aquí están los hechos de la recuperación de Michael Schumacher desde ese fatídico día.

Es difícil de creer, dado el dominio imparable de la Fórmula 1 que alguna vez tuvo Michael Schumacher, pero han pasado más de 10 años desde que desapareció de la vista del público después de sufrir una lesión cerebral traumática en un accidente de esquí mientras estaba de vacaciones. Nunca ha surgido información sólida sobre la verdadera condición de Schumacher o su estado de recuperación, por lo que, con ese fin, aquí están los hechos y la cronología de la recuperación y rehabilitación en curso de Michael Schumacher.

¿Qué le pasó a Michael Schumacher?

Tras retirarse de la Fórmula 1 a finales de 2012, Schumacher estuvo de vacaciones a finales de 2013 con su familia (su mujer Corinna, su hijo Mick y su hija Gina) y algunos amigos de la familia en el lujoso complejo turístico de Méribel, en Francia.

El piloto alemán conocía bien las pistas de esquí, ya que había pasado muchas vacaciones y eventos fuera de temporada esquiando en complejos turísticos de toda Europa.

No solo eso, sino que Schumacher era propietario de un chalet en el valle y conocía muy bien el complejo y sus pistas. El momento de su visita anual a la zona siempre era bienvenido, no solo porque coincidía con la temporada baja de la F1, sino también porque coincidía con las celebraciones del cumpleaños de Michael el 3 de enero.

Pero, justo antes de las 11 de la mañana, hora local, del 29 de diciembre de 2013, en una mañana soleada, fresca y gloriosa, Schumacher decidió dirigirse a una de las zonas “fuera de pista” junto a la pista, ya que iba a ayudar a otro esquiador, una decisión fatídica con trágicas consecuencias.

Schumacher golpeó una de las rocas expuestas en la zona de nieve no despejada y perdió el control. Schumacher salió despedido por los aires, cayó y chocó contra otra roca a 10 metros de distancia, golpeándose el lado derecho de la cabeza. Su casco se partió en dos por el impacto.

El piloto de 44 años estaba consciente al principio, pero no podía responder a las preguntas de forma coherente y mostraba un comportamiento “errático”, lo que llevó a los médicos, que llegaron al lugar en cuestión de minutos, a solicitar una extracción por aire.

Schumacher fue trasladado inicialmente en helicóptero al hospital de Moutiers, antes de ser trasladado a una unidad de traumatología especializada en Grenoble, donde rápidamente se hizo evidente la gravedad de sus lesiones.

Schumacher estaba en coma cuando llegó al hospital y necesitó una cirugía inmediata en el cerebro para detener la inflamación y garantizar un suministro continuo de oxígeno.

Una conferencia de prensa inicial confirmó que el estado de Schumacher era “extremadamente grave”, y el subdirector del hospital, el profesor Marc Penaud, dijo en ese momento que era simplemente imposible predecir el futuro del campeón del mundo.

Schumacher sufrió una hemorragia intensa y hematomas en el cerebro, por lo que fue puesto en coma inducido. El jefe de anestesiología del hospital, Jean-François Payen, dijo que, si Schumacher no hubiera llevado casco, no habría sobrevivido a la caída.

El neurocirujano Stephan Chabardes dijo a los medios en una conferencia de prensa: “No respondió a las preguntas después del accidente. No tuvo una reacción neurológica normal”.

Con Schumacher rodeado de su familia, amigos cercanos corrieron al hospital para verlo.

Jean Todt, su ex jefe en Ferrari y entonces presidente de la FIA, fue a su lado, al igual que el neurocirujano Gerard Saillant, el principal médico de la FIA que se había hecho muy amigo de Schumacher tras el accidente que le rompió la pierna en Silverstone en 1999.

El mundo de la F1 reacciona al accidente de Michael Schumacher

Con la gravedad del accidente de Schumacher cada vez más clara y las perspectivas de que el alemán reanude una vida normal cada hora más escasas, la Fórmula 1 entró en estado de shock.

Mika Hakkinen, el principal rival de Schumacher en las categorías inferiores y en el apogeo de sus duelos McLaren/Ferrari a finales de los 90, publicó un mensaje de apoyo para el hombre con el que había compartido tantos recuerdos en la pista.

“Tu accidente es ahora sólo otro desafío”, dijo.

“Tienes que luchar duro de nuevo, como solíamos hacerlo los dos en la pista. Hazme un favor: sólo por esta vez no intentes ganarle al reloj. No tienes que marcar tu mejor tiempo en esta carrera. Tienes que tomarte todo el tiempo que necesites”.

El cuatro veces campeón del mundo de Fórmula 1, Sebastian Vettel, que había disfrutado de la tutoría y el apoyo de Schumacher durante su propio ascenso a la cima de la Fórmula 1, habló de su conmoción por el accidente: “Estoy conmocionado y espero que se mejore lo antes posible. Deseo mucha fuerza a su familia”.

Con la noticia del accidente de Schumacher resonando fuera de la F1, también llegaron mensajes de apoyo de la canciller alemana, Angela Merkel, y otras leyendas del deporte como Boris Becker y Lukas Podolski.

Las escenas en el Hospital de Grenoble mostraron cuánto interés de los medios de comunicación había en la difícil situación de los Schumacher, con una Corinna desconsolada que tuvo que lidiar con fotógrafos y periodistas despiadados que se le metían en la cara mientras se dirigía al hospital todos los días.

Junto a ella y sus hijos estaban Sabine Kehm, la encargada de prensa de Schumacher durante mucho tiempo, que se ocupó de los medios de comunicación con destreza y valentía en todo lo que la familia decidió hacer, así como Ralf y Rolf Schumacher, el hermano y el padre de Michael, respectivamente.

Pero, como ejemplo de algunos de los comportamientos repugnantes mostrados por algunos medios menos escrupulosos, un periodista se disfrazó de sacerdote para poder acceder a la habitación del hospital de Schumacher. Fue descubierto rápidamente y escoltado fuera del lugar.

“En nombre de Corinna, me gustaría pedirles que no nos presionen”, dijo Saillant mientras se dirigía a los medios de comunicación. “Ni a nosotros ni a la familia. Pueden hacer todo lo posible para ayudar a Schumacher a ganar esta difícil batalla dejando a los médicos en paz. No estamos ocultando nada”.

Michael Schumacher ahora: Qué sabemos sobre la condición de Michael Schumacher

El proceso de despertar a Schumacher de su coma comenzó a fines de enero de 2014, pero hubo que esperar hasta abril de 2014 para obtener una actualización sobre el progreso de Schumacher, cuando Kehm publicó un comunicado en el que decía que había estado mostrando algunos signos de “conciencia y despertar”.

Dos meses después, se confirmó que Schumacher ya no estaba en coma y pudo abandonar el Hospital de Grenoble.

“Michael ha dejado el CHU Grenoble [hospital] para continuar su larga fase de rehabilitación. Ya no está en coma”, dijo Kehm.

El alemán fue llevado al Hospital Universitario de Lausana en Suiza, cerca de la casa de Schumacher, para continuar con la rehabilitación médica.

Fue en ese momento cuando una persona que logró acercarse a Schumacher mostró otra muestra de egoísmo depravado.

Un hombre, que trabajaba como ejecutivo de la empresa suiza de rescate aéreo con helicópteros Rega, fue arrestado bajo sospecha de estar involucrado en el robo y filtración de los registros médicos de Schumacher, y el ladrón intentó vender los registros a varios medios de comunicación por 50.000 euros.

Tras rastrear una dirección IP utilizada en el robo, el sospechoso fue arrestado tras el transporte de Schumacher a Lausana. Detenido en Zúrich, el sospechoso fue encontrado ahorcado en su celda a la mañana siguiente.

Mientras Corinna construía una suite médica integral en su casa familiar en el lago de Ginebra, que se cree que cuenta con numerosos médicos y asistentes, los Schumacher se retiraron a la privacidad.

“De ahora en adelante, la rehabilitación de Michael se llevará a cabo en su casa”, dijo Kehm a mediados de 2015.

“Teniendo en cuenta las graves lesiones que sufrió, se han logrado avances en las últimas semanas y meses”.

Pero las esperanzas de un gran avance se vieron frustradas en 2016, cuando los Schumacher iniciaron acciones legales contra una revista alemana. Bunte afirmó que Schumacher podía caminar y “levantar un brazo”, una información que Kehm consideró “irresponsable”.

La audiencia judicial dio como resultado que el abogado de Schumacher, Felix Damm, revelara que el entonces piloto de 47 años no podía caminar ni mantenerse de pie, ni siquiera con ayuda.

“Desafortunadamente, un informe de prensa reciente nos obliga a aclarar que la afirmación de que Michael podía volver a moverse no es cierta”, dijo Kehm. “Tal especulación es irresponsable porque, dada la gravedad de sus lesiones, su privacidad es muy importante para Michael. Desafortunadamente, también dan falsas esperanzas a muchas personas involucradas”.

El veterano representante Willi Weber, a quien no se le permitió visitar o ver a Schumacher, ha hablado sobre cómo la familia optó por la privacidad por encima de todo lo demás: el hombre de 81 años también reveló recientemente que ya no tiene ninguna esperanza de volver a ver a Schumacher.

“Me parece muy desafortunado que los fanáticos de Michael no sepan sobre su salud. ¿Por qué no se les dice la verdad?”

En enero de 2019, Schumacher cumplió 50 años, y la familia emitió un breve comunicado para agradecer a sus seguidores.

“Queremos recordar y celebrar sus victorias, sus récords y su júbilo”, se leía en el comunicado.

“Pueden estar seguros de que está en las mejores manos y que estamos haciendo todo lo humanamente posible para ayudarlo.

“Por favor, comprendan si estamos siguiendo los deseos de Michael y manteniendo un tema tan delicado como la salud, como siempre lo ha sido, en privado. Al mismo tiempo, les agradecemos mucho su amistad y les deseamos un año 2019 saludable y feliz”.

En los últimos años, no ha habido actualizaciones familiares sobre la condición de Schumacher, con solo vagas pistas ofrecidas por Todt como confidente de confianza y amigo de la familia.

“Dejémoslo en paz”, dijo a principios de este año.

“Respetamos los deseos de privacidad de Corinna y sus hijos, aunque sabemos, por supuesto, que el accidente tuvo consecuencias. Pero quien dice que sabe algo, no sabe nada. Siempre voy a verlo. Él y su familia son mi familia”.

En 2024, los Schumacher ganaron una batalla legal con la publicación alemana Die Aktuelle. En 2023, la publicación publicó una edición que incluía una foto de la leyenda de la Fórmula 1 bajo el titular “Michael Schumacher, la primera entrevista, sensación mundial”.

La entrevista fue generada por IA, utilizando datos de entrevistas anteriores de Michael Schumacher para generar “respuestas” a las preguntas que la publicación le hizo a “Schumacher”.

Die Aktuelle se enfrentó a una condena generalizada por la entrevista generada por IA, y los Schumacher emprendieron acciones legales contra la revista y su grupo editorial Funke Magazines: la editora en jefe Anne Hoffmann fue despedida mientras que la directora general de Funke, Bianca Pohlmann, se disculpó por el artículo “de mal gusto”.

“Este artículo de mal gusto y engañoso nunca debería haber aparecido. “Esto no se corresponde en ningún caso con los estándares de periodismo que nosotros –y nuestros lectores– esperamos de una editorial como Funke”, afirmó en un comunicado.

La familia de Schumacher recibió una indemnización de 200.000 euros, confirmada por el Tribunal Laboral de Múnich en mayo de 2024, que deberá abonar Funke Magazines.

¿Qué novedades hay sobre el estado de salud de Michael Schumacher?

El año pasado, Schumacher recibió un premio del estado de Renania del Norte-Westfalia en Alemania, y Corinna y Gina se unieron a Todt en la ceremonia para recoger el premio en nombre de Michael.

La ceremonia, que se otorga a cualquiera que haya hecho una “contribución excepcional al mundo”, tuvo lugar a solo unos kilómetros de la casa de la infancia de Michael.

Fue en la ceremonia donde Todt reveló que él y Michael, que en su día formaban un dúo que infundía terror en los corazones de sus enemigos en la pista, ahora se sientan juntos en silencio para ver las carreras por televisión.

“No lo dejo solo”, dijo Todt a RTL. “Él, Corinna, la familia, hemos tenido tantas experiencias juntos. La belleza de lo que hemos vivido es parte de nosotros y continúa”.

“No extraño a Michael, lo veo. Sí, es cierto, veo las carreras con Michael. Pero claro, supongo que lo que extraño es lo que solíamos hacer juntos”.

Este mes, Todt le dijo a L’Equipe: “[Él] simplemente no es el Michael que solía ser. Es diferente y está maravillosamente guiado por su esposa e hijos que lo protegen.

“Su vida es diferente ahora y tengo el privilegio de compartir momentos con él. Eso es todo lo que hay que decir. Desafortunadamente, el destino lo golpeó hace diez años. Ya no es el Michael que conocimos en la Fórmula 1”.

En el documental de Netflix Schumacher, que presentó imágenes inéditas detrás de escena del piloto alemán en su vida familiar privada antes del accidente, tanto Corinna como Mick ofrecieron actualizaciones que han dejado pocas dudas sobre la verdadera condición del legendario piloto de F1.

“Michael está aquí”, dijo Corinna. “Diferente, pero está aquí, y eso nos da fuerza, creo. Estamos juntos. Vivimos juntos en casa. Hacemos terapia. Hacemos todo lo posible para que Michael mejore y para asegurarnos de que esté cómodo. Y simplemente para que se sienta nuestra familia, nuestro vínculo.

“Y pase lo que pase, haré todo lo que pueda. Todos lo haremos. Estamos tratando de seguir adelante como una familia, como a Michael le gustaba y todavía le gusta. Y seguimos adelante con nuestras vidas”.

Mick, que tuvo que lidiar con el trauma de presenciar el accidente de Michael, desde entonces ha seguido adelante para forjar su propia carrera en el automovilismo y compitió como parte de la Academia de Pilotos de Ferrari para ganar el título de Fórmula 2 en 2020. Corrió con Haas en 2021 y 2022.

“Simplemente tengo un gran respeto por papá. Siempre lo he tenido”, dijo Mick en el documental. “Simplemente tiene esta presencia. Cuando entra en una habitación, todos se quedan en silencio. Así es como lo recuerdo.

“Cada vez que lo miro, me digo: ‘Sí, así es como quiero ser’. Tanta fuerza, tanta paz mental total.

“Creo que papá y yo, ahora nos entenderíamos de una manera diferente. Simplemente porque hablamos un idioma similar, el idioma del automovilismo. Y que tendríamos mucho más de lo que hablar.

“Es ahí donde tengo la cabeza la mayor parte del tiempo. Pienso que sería genial. Eso sería todo. Dejaría todo por eso”.

Recientemente, Damm se sinceró sobre por qué se tomó la decisión de mantener el silencio radial en torno a la leyenda de la F1: “Siempre ha sido una cuestión de proteger la información privada. Por supuesto, tuvimos muchas discusiones sobre cómo hacerlo.

“También consideramos si un anuncio final sobre el estado de salud de Michael podría ser el camino correcto a seguir.

“Pero eso no habría sido el final y habría tenido que haber ‘informes de nivel de agua’ actualizados permanentemente. Porque como persona afectada, no está en tus manos ordenar a los medios de comunicación que pongan punto final al asunto.

“Los medios podrían retomar un informe así una y otra vez y preguntar: ‘¿Y cómo se ve ahora?’, uno, dos, tres meses o años después del informe. Y si quisiéramos tomar medidas contra esta información, tendríamos que lidiar con el argumento de la autoapertura voluntaria”.

A pesar de los informes ocasionales de los medios que sugieren un cambio en las circunstancias de Schumacher, PlanetF1.com entiende que, a menos que su familia lo confirme, todos esos informes deben considerarse inexactos.

La familia de Michael Schumacher sigue manteniendo un silencio absoluto

Schumacher cumplió 56 años el 3 de enero de 2024, cuando ya ha transcurrido más de una década desde el accidente de esquí que lo cambió todo. Hasta el día de hoy, algunos fanáticos (y periodistas) con derecho a recibir información sobre el estado de salud de Michael siguen teniendo una equivocada sensación de que tienen derecho a recibir información sobre el estado de salud de Michael.

Esto lleva a críticas visibles ocasionales a Corinna y a la familia Schumacher, quienes, frente a esa presión, han mantenido su postura y el exitoso silencio absoluto es encomiable por su solidez inquebrantable.

El deportista Schumacher era infamemente despiadado y testarudo, cualidades que transformaron a un hombre generoso, amable y cálido en la implacable fuerza de la naturaleza en la pista cuya fuerza de voluntad y determinación transformaron lo que significaba ser un piloto de Fórmula 1 de primer nivel, estándares que todavía existen y se deben cumplir hoy en día.

Tras su matrimonio con Corinna en 1995, la pareja superó los bajos de los primeros fracasos de Michael en los campeonatos con Ferrari, hasta las increíbles alturas que él y la Scuderia alcanzaron a principios de la década de 2000 para establecer récords, algunos de los cuales siguen vigentes 20 años después.

A pesar de todo, Michael logró mantener una distancia digna de los medios una vez que se alejó de la pista de carreras.

Con esa distancia, a pesar de la increíble atención que se le brindó a la familia Schumacher debido a sus éxitos, tanto Michael como Corinna pudieron criar a sus hijos lejos del escrutinio público y las presiones asociadas, lo que le dio a la familia una vida sólida y “normal” mientras iban a la escuela y vivían sus propias vidas.

La increíble capacidad de Schumacher para separar a Michael el hombre de Michael el piloto es una habilidad y una mentalidad clave que Corinna adoptó para la rehabilitación de Michael durante la última década.

En lugar de ser crítica, como observadores externos con curiosidad morbosa, se le debería agradecer por esta posición, no criticarla.

Se conservan los recuerdos del público sobre el infalible campeón del mundo, el Barón Rojo dominante al que todos los pilotos, sin importar lo que proclamaran, temían en la pista.

Inmaculadas están las imágenes de la alegría de Michael en cada podio, su emoción por otro título y, sí, su satisfacción por ser simplemente el mejor en lo que hacía. Hay que estar agradecido por eso, no sentirse con derecho.

Con la familia teniendo que lidiar con la inimaginable tristeza y tormento de su realidad, tan alejada de los embriagadores días de gloria pasada y la promesa de lo que debería haber sido la vida de Michael después de su retiro, tal dignidad y compostura frente a esa presión es evidencia de que las fortalezas de Schumacher son compartidas con Corinna, Mick y Gina.

Ojalá que esa fuerza perdure por mucho tiempo.

“‘Lo privado es privado’, como siempre decía”, dijo Corinna el año pasado, mientras derramaba lágrimas por su esposo en la ceremonia de Estado.

“Para mí es muy importante que pueda seguir disfrutando de su vida privada tanto como sea posible. Michael siempre nos protegió y ahora nosotros estamos protegiendo a Michael”.